Nombre: Javier
Apellidos: Casquet Calero
Edad 38 años
Altura: 1,74
Peso: 67
Estudios: EGB
Profesión: Transportista de mercancías

Biografía:
Soy de un pueblo barcelonés llamado Palafolls. Nací el 25 de abril de 1980.

Provengo de una familia humilde y trabajadora que me enseñó valores como la tolerancia y el respeto. Valores que me han servido de mucho a lo largo de mi vida y que en definitiva han sido el reflejo de mi alma.

Tengo 2 hermanos mayores y una hermana menor con los que compartí una buena infancia.

Empecé a trabajar a los 16 años. Hasta la actualidad he trabajado en varios oficios y llevo un par de años dedicándome al transporte en una lavandería industrial.

Me independicé a los 25 años y ahora vivo en la ciudad de Tarragona.

Aficiones:
Me encanta la música, es esencial en mí día a día y eso me da vitalidad. También me gusta disfrutar acompañado de familiares y amigos de una buena cena o comida.

En definitiva me considero un chico aventurero al que le gusta viajar, ir al cine, hacer deporte en mi día a día, salir a divertirme y saborear el mar y la montaña tantas veces como se me presente la ocasión.

¿Por qué te gustaría ser elegido Mr. Gay Pride España 2018?
Se trata de un reto personal. Tengo una cuenta pendiente conmigo mismo, tiempo atrás me avergonzaba por ser como soy y me costó mucho salir del armario.

Ahora estoy en un momento de mi vida en el que me siento orgulloso de lo que soy. Por esa razón no quiero dejar escapar esta oportunidad y deseo vivir al máximo esta experiencia. Quiero representar a todo el colectivo gay que se sienta identificado con mi historia de vida y por qué no también a ese sector de edad más avanzada para demostrarles que nunca es tarde para mostrar al mundo  que si se puede. Lo importante es sentirse bien con uno mismo y extrapolarlo al exterior para compartirlo.

¿Cuál sería tu objetivo social?
Me gustaría ayudar a dar un empujón a todos aquellos que aún no se han atrevido a salir del armario por los miedos interiores que provienen de los prejuicios de esta sociedad.

Apoyar también a las personas LGTBI que quieren construir una familia y reivindicar esos derechos indistintamente del género. Simplemente teniendo en cuenta la importancia de ser  unos padres que lo único que desean es amar a sus hijos, sin que el resto ponga trabas en el camino.

Por último, fomentar el respeto a cualquier género y condición sin que nadie se interponga en lo que quieras o sientas hacer, siempre y cuando se trate de no hacer daño a nada ni nadie.