Después de unos meses del certamen y echando la vista atrás, puedo decir que la experiencia empieza en el minuto cero. No solo cuando llegas al hotel a conocer a los demás chicos, si no el día de la llamada, para mi ese día fue clave.

Aún recuerdo la ilusión y lo poco que me lo creía. Sin duda vives unos días de muchísima emoción, no te esperas nada y consiguen sorprenderte a cada momento. Sin darte cuenta vas involucrándote y haces que cada momento sea único. Es como vivir en una burbuja durante unos días.
Luego viene el momento de la gala final, donde todas tus emociones y sentimientos están a flor de piel. Nervios, ilusión, ganas… un sin fin de sensaciones que experimentas juntas.
Eso solo se consigue con un certamen como este, en el que sin duda te sientes como una verdadera estrella representado a tu comunidad y los valores a los que pones voz.
Repetiría cada año si fuera posible, la verdad.
Un abrazo.
Diego