Nombre: Nicolás
Apellidos: Quintero Hernández
Edad: 26 años
Altura: 1.76 cm
Peso: 76 kilos
Estudios: Graduado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos.
Profesión: Técnico en Relaciones Laborales y Recursos Humanos.
Aficiones:
Una de mis principales aficiones siempre ha sido el deporte, siendo el fútbol mi favorito, pero al contrario que mi hermano no se me daba especialmente bien. Así, pasé a disfrutar varios años del voleibol que se me daba un poquito mejor. No sin antes, pasar por otros deportes como el baloncesto, tenis, fútbol sala y boxeo. Mis otras pasiones son la música y el baile, con las que me evado de todos los problemas. También disfruto salir de fiesta con mis amigos, ir al cine, a la playa, al gimnasio, así como de la compañía de mis perros.
Biografía:
Soy canario, natural de Tenerife, aunque actualmente resido en Marbella (San Pedro de Alcántara). El pequeño de una familia de tres hermanos.
Con 18 años inicié mis estudios de Diplomado en Relaciones Laborales por la Universidad de La Laguna, para posteriormente continuarlos en Madrid. En esta ciudad, me inicié en el mundo laboral trabajando estos últimos años en diferentes empresas del sector en Recursos Humanos.
Hace unos meses, tomé la decisión de dejarlo todo y cambiar Madrid por Málaga. Decisión tomada por amor. Ahora en Málaga, me encuentro con la posibilidad de volver a retomar ciertas inquietudes que había dejado aparcadas. Es el lugar idóneo para ello. La Costa del Sol, su gente, su clima me hace estar como en casa.
¿Por qué te gustaría ser elegido Mr. Gay Pride España 2017?
La razón principal por la que me gustaría ser elegido Mr. Gay Pride España 2017, es porque siempre me ha atraído la participación en este tipo de eventos. Sin embargo, caminé hacia lo seguro. Me dediqué a estudiar y a trabajar, olvidando esa parte que probablemente fuera un motor importante en mi vida. Actualmente, siendo más maduro y encontrándome más seguro de mí mismo, me veo capacitado para afrontar este reto.
¿Cuál sería tu objetivo social?
Mi “salida del armario” fue tardía, debido a todos los prejuicios existentes en la sociedad. Durante ese tiempo, como mucha otra gente lo pasé realmente mal. Miedos, preocupaciones e inseguridades. Vidas paralelas.
Es por todo esto, que me gustaría ayudar a cualquier persona que esté viviendo una situación similar a lo que yo viví. Me refiero a aquellos que no se atreven a asumir su condición sexual por miedo al qué dirán. A posibles represalias o insultos.
Quiero que no se sientan solos, ni inseguros ante el hecho de afrontar algo tan respetable como ser homosexual. Sé que muchos, a día de hoy, no se sienten preparados para afrontarlo o que simplemente prefieren seguir manteniéndose en el anonimato. Sin embargo, yo les diría que no desaprovechen el tiempo, que empiecen a ser felices tal y como son.
Si pisas con paso firme en tu vida, seguro de ti mismo, eso se verá reflejado y ya no será la sociedad quién marque las pautas en tu vida. Porque tú eres dueño de tu vida y no los demás. Una frase que llevo grabada a fuego: “nunca es demasiado tarde”. En definitiva, ojalá nunca nadie tenga que volver a usar la expresión “salir del armario”. Eliminemos las etiquetas.